Lamento haber regresado después de mucho tiempo, han pasado muchas cosas que no me han permitido seguir plenamente con el proyecto... Desde cosas muy personales, hasta cosas familiares y situaciones ajenas que te involucran emocional y físicamente.
Por una parte me encuentro bien en muchos aspectos y pese a esas dificultades sigo aquí, y creciendo. Por otra, el saber que una amistad muy grande siguen en el hospital me tiene un tanto preocupada (Pero todos los días pido por su recuperación), se que el estará bien, pero ya quiero que acabe ese pasaje tan pesado por lo que está pasando.
Pronto iré a verlo (mándenme los mejores ánimos para él :D) y esperemos que nos de buenas noticias (Como que regresa a casa o algo así XD)
No puedo prometer que el siguiente capítulo de la historia se revele pronto, puesto a que no se que me depara el futuro... Vivo en el presente y caminaré junto con el con la cara en alto.
Pero bueno, para compensar un poco el tiempo les vengo a regalar un nuevo Bonus.
Este es de algo que en realidad me pasó y que me resultó muy curioso, y que mejor manera de compartirlo con ustedes que con un cómic de la anécdota.
En ese momento no sabía si reír, llorar, sentir lástima o qué... Simplemente... Mejor véanlo y me dicen que opinan!!!
Gracias por toda su comprensión y apoyo y... ¡A darle, porque Daniel Cat San viene con más!
Angélica B. García.
